martes, 26 de octubre de 2010

Ave de paso

Ha pasado el tiempo, y me agoté, tanto romanticismo inventado para nosotras, para retenernos en un hogar, pues no podemos abandonar los hijos como los hombres, es muy mal visto, una puta, sí eso me dijeron, una puta, como si una puta no pudiera ser una esmerada madre.  Se agota este dolor que empapa de letanías la almohada, los inviernos de inconfesables sueños mientras duermo.  Yo no seré tu muerta, la viuda que ensució sus mejillas con la luz fría del amor.  Un manantial escurre por mis muslos despiertos en los márgenes de la noche y la vulgaridad que no se ve, tu paraíso se acerca en esta madrugada y te abriré la puerta, te espero a hurtadillas, una emoción desenfrenada hace latir mi vientre hasta hacerme vomitar, llueve como siempre en esta ciudad donde nadie quiebra las horas, ven, acaricia hasta mi grito esta joya, orfebre mío pule cada sensación, las yemas de mis dedos arañan tus hombros, ¡cómo siente cada pezón turgente el vello de tu pecho¡ goza de este vuelo, abre la majestuosidad de este tabernáculo, complace mi fantasía, arremete con fuerza lleno de sangre revienta en la concha de hilos para amarrarte, mientras disparas tu chorro de ave de paso.

1 comentario:

  1. Me ha encantado tu blog, lo que escribes y las imágenes con que ilustras. Sugerencia: podrías vincular las imágenes con música midi voice en lugar de hacerlo con el alojamiento de la imagen.

    Seré una seguidora de tus cuentos exquisitos.

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